¡Hola, blogosfera!
-¡HOLA, SEÑÁ DAURMITH!
Tiempo sin vernos, la verdad es que no tengo perdón. Tampoco es que lo pida, una es como es, pero no se puede negar que últimamente no curro nada en esta vuestra biblioteca.
– YA LO HEMOS NOTADO, YA. AL MENOS ALGUNOS DE NOSOTROS.
Los irreductibles, lo sé. Y mucho que os lo agradezco.
– MENOS COBA. ¿Y POR DÓNDE ANDA USTED AHORA, SI SE PUEDE SABER?
En Málaga.
– BUF, QUÉ CALOR, ¿NO?
Sí, un poquito. Pero bueno, nada que no se remedie con un frapuccino y un ratito de charla con vosotros. ¡Y no es coba! Al menos el aeropuerto está acondicionado, aunque ahora mismo me está dando el sol en el cuello que no veas… También es un consuelo haber pasado por todas las pruebas de los controles de seguridad, menos mal que suelo venir preparada con zapatos que no pitan y -por si acaso- calcetines sin agujeros.
– QUÉ BIEN. ¿HA DICHO FRAPUCCINO?
Sí, en el Starbucks, bajando las escaleras un poco a la derecha, no tiene pérdida. ¿Es que os aburro?
– NOOO, NO, QUÉ VA, FALTARÍA MÁS, CON LO QUE NOS GUSTAN SUS ENTRADAS. CUANDO HAY ENTRADAS, CLARO. SI ES QUE HAY ENTRADAS, TODO HAY QUE DECIRLO. PORQUE ÚLTIMAMENTE ESTO TIENE MENOS ENTRADAS QUE EL LABERINTO DEL MINOTAURO.
Jo, ya lo sé, mea culpa, mea culpa, mea maxima culpa, confiteor fratres quia peccavi nimis cogitatione, verbo, opere et omissione, y todo eso. Pero es que me llevan un poco de cráneo últimamente, y cuando llego a casa tampoco me queda mucha neurona, ni siquiera para escribir tonterías aquí, y si tengo un rato libre generalmente me pongo a hacer otras cosas…
– YA, YA. ¿ABAJO A LA DERECHA, HA DICHO?
Sí, cerca de las pantallas. No tiene pérdida. Esta mañana me he levantado a una hora tan temprana que era probablemente demasiado temprano para ser así de temprano, y tengo la neurona un poco descolocada, cosa que he intentado remediar con café. Mala idea, claro, porque ahora no sólo tengo pis, sino que si encadenamos otro retraso como el de dos horas y media de esta mañana puedo asesinar a mordiscos al piloto.
– USTED SE LO HA BUSCADO, POR IR POR AHÍ DE PARRANDA.
Ya, bueno, no es mucho consuelo ahora mismo. Sobre todo porque de camino a lo que tenía que hacer de trabajo he pasado cerca de sitios chulísimos como Archidona (que me han recomendado), y una se queda rabiando por no poder ir. Al menos aún no.
– NO SE APURE, YA LLEGARÁN TIEMPOS MEJORES. MIENTRAS TANTO DICEN QUE ESCRIBIR EN BLOGS ES MUY TERAPÉUTICO PARA ESTAS COSAS…
¿Y en Facebook? ¿O Twitter?
– NO ME SEA USTED ORDINARIA, MUJER. ESAS COSAS ESTÁN MUY BIEN Y VALEN PARA LO QUE VALEN, PERO LOS BLOGS TIENEN UN CACHÉ, UN JE NE SAIS QUOI, UN ALGO…
Sí, pero habiendo pasado la moda, porque ha pasado, nos quedamos aquí vosotros y yo, o sea, los irreductibles. Lo cual, dicho sea de paso, me parece muy bien, una es cabezota por naturaleza. Yes, ma’am, just go downstairs and it’s there, slightly to your right; it’s close to the information panels, you can’t miss it.
– ¿¡QUÉ LE HA PASADO EN LA BOCA!?
Nada, una señora que quería saber dónde está el Starbucks.
– UMMM, FRAPUCCINO…
Sí, muy rico. Como iba diciendo, los blogs son…
– ¿ABAJO A LA DERECHA?
No tiene pérdida, en cuanto bajas las escaleras lo ves.
– ¿Y HAY MUCHA GENTE?
Estaba bastante vacío cuando he ido yo. El esfuerzo que conlleva mantener un blog parece haber sido demasiado para el ejército de blogueros que saturó la red hace unos añitos. Es una pena, porque había gente sensacional, ¿os acordáis de Aaiunea?
– …
¿Hola?
– …
¿Blogosfera? ¿Estás ahí?
¿Hola?
*Suspiro*. A veces la gente deja los blogs, y a veces los blogs le dejan a uno. Al menos siempre nos quedará el Starbucks del aeropuerto de Málaga…
Jojojojojojojojojo. Es casi tan normal como una llamada de teléfono XDDDDD
Aaiunea está comatoso pero, de tanto en tanto, suelta aún alguna perla. Aún no es el momento de enterrarlo.
Hola. Aquí el eco. Más que nada por certificar que siempre quedarán irreductibles al otro lado, pasando de vez en cuando un ratito de ansiedad pensando en si han clausurado la Biblioteca o no…
El frapuccino, por cierto, un poco falto de personalidad pero refrescante a más no poder, gracias.
🙂
Es bueno saber que Hay Alguien Ahí Fuera y que también se refresca con frapuccinos, ¡gracias eco, digo, César! Y también es bueno ver que Aaiunea aún colea (\»garrea\», dirían en mi pueblo, un verbo que siempre he encontrado ligeramente horripilante).
Ahora, twitteros todos, a ver: hacedme esta entrada en 140 caracteres.
¿Por qué le parece horripilante el verbo? En otros sitios significa que el ancla de un barco no agarra y se desliza por el fondo. Una putadilla pero no horripilante, se vuelve a tirar y ya está.
Buen provecho (el café).
gus, por asociaciones. Generalmente cuando pisas una araña o una cucaracha se quedan moviendo espasmódicamente una pata, \»garreando\», muertas o casi pero aún intentando correr. Y la gente también.
Esto, yo no quiero ser indiscreto, no es que tengamos mucha confianza y tal. Pero. ¿Qué es de tu vida? Quiero decir que casi siempre que escribes algo estás de viaje en algún lado. ¿Te has colocado de baúl de la Piquer?
¡Anda, en el aeropuerto de Málaga! Al \»laíto\» de mi casa y yo sin saber que hay un Starbucks. Aunque no voy a ir al aeropuerto sólo para tomar un café, más que nada por evitar la envidia que me da ver a los demás irse de viaje…
El Rodriguez, nuestro blog antes llamado Comentaristas Dispersas -blog-, tiene asumido que de vez en cuando él queda al mando del barco. Nunca se ha ido a buscar un frapuccino en medio de una conversación… no sé si el conocer a la Blogosfera sería una buena influencia para él 😀
(ánimo con los viajes de trabajo, cuando a mi me tocaba en mi empresa decían \»qué suerte tenéis los que viajáis\» pero lo cierto es que para mí era más bien frustrante no poder visitar casi nada… ¿al final pudiste escaparte a ver la catedral de León?)
¡Abrazos blogueros!
Qué va. Bueno, por fuera sí, pero por dentro, nada de rien. Pero algún día lo conseguiré, ya lo creo que lo conseguiré.
Jejejeje, me has hecho sonreir! Va link en mi próximo Lo mejor de la quincena, saludos!
Anónima, ahora que estamos solas (las bibliotecas no hablan…) te diré que El Rodriguez ignora lo que es un frappuccino.
Aunque en Argentina hay Starbrucks, tampoco lo sabrá pues es hacer publicidad y no es cosa que nos demande la dueña de casa. La que agasajaré en Flickr con un capuccino común y argentino, si apetece.
Lo que me gustó de este post que está como para completar uno en CD ¡y nunca me verán en twitter porque en 120 caract…