Llevo días, no exactamente apartada de internet, sino… bloqueada por internet. Mi silencio se debe más bien a un exceso de ideas, ninguna de las cuales consigo poner por escrito de forma coherente. Es más que nada porque queda poco para que termine este verano vulcánico y empiece un septiembre que promete, porque sale el nuevo libro de Richard Dawkins sobre evolución, que tiene muy buena pinta y que ya tengo reservado por Amazon (¡descuentito bueno, descuentito bueno!). Para mí eso ya salva el mes entero.
Pero claro, toda cara tiene su cruz. Y es que, estimulada por el inminente placer de la lectura de The Greatest Show on Earth, últimamente paso mi tiempo virtual navegando por varios foros y webs del mundillo, haciendo catas de cómo van las cosas en el mundo de la teoría sintética y alrededores. Van bien, para los interesados. Siempre hay cosas chulas e información disponible gratis aunque la verdad es que si me toca la lotería me voy a comprar una suscripción electrónica a Nature como que ya porque siempre me dejan con la miel en los labios, ay.
Salvo, por supuesto, los inevitables chalados, IDiotas, creatas y demás ralea, que siguen intentándolo con entusiasmo digno de mejor causa. Es una superposición curiosa, porque puedo tener una pestaña abierta en la web de Dawkins viendo un vídeo sobre fósiles transicionales, y otra pestaña abierta en Pharyngula leyendo oootro ejemplo más de lo alejados de la realidad que están algunos creacionistas. Todo lo cual me bloquea un poco, la verdad.
Y para añadir al bloqueo (pero de risa), véase la imagen. Todos estos foros y demás, en cuanto tienen algo de tráfico, suelen incluir publicidad, para ayudar con los gastos. Y a veces la publicidad es divertida por lo paradójica. He visto muchas veces anuncios de lecturas de tarot en la muy escéptica web de James Randi, y en sitios parecidos. Y ahora lo que me veo, que tiene narices la cosa también, es ese anuncio, que pregunta cuál es tu nivel de inteligencia. Vale. Y acto seguido te desafía a que digas el número que ves en el círculo. Se supone que para que sepas cuál es tu nivel de inteligencia (accediendo, claro, a algún tipo de web publicitaria con más o menos trampitas).
Mi nivel de inteligencia, no sé. Normalito. Pero tengo una idea bastante clara del nivel de inteligencia de quienes se han sacado de la manga semejante test. Más que nada porque lo que proponen sólo sirve para averiguar si eres daltónico.
De modo que, para los despistados: si no aciertas la preguntita, no te pongas triste. No es que seas tonto. Es sólo que deberías ir al oftalmólogo.