Me aprovecho de la wifi del bar del hotel para anunciar que:
Uan: en León hace un frío que pela.
Tu: eso de que cuando nieva hace menos frío es una filfa, porque aquí lleva nevando un rato y el frío es tal que quema.
Zrí: se pueden hacer unos muñequitos de nieve la mar de majos en el alféizar de la ventana del hotel, como una especie de belén en miniatura, o quizá un diorama de mutantes. La prueba [{aquí http://plixi.com/p/60529412}].
For: paradójicamente, en el hotel hace un calor espantoso. Al parecer en las habitaciones de los pisos inferiores no hace calor, de modo que he pedido que me cambien del sexto al primero. Es verdad que ya no es un horno.
No hay faiv porque de repente me he quedado en blanco. Como León. Voy a ver algunos blogs. Taluego.
P.S. El que no esté encantado del descubrimiento del bicho arsenicófilo rarísimo es que no ha tenido infancia, ni ha soñado nunca, ni sabe lo que es la maravilla. ¡Qué chulada! ¡Hasta en el ADN!
Molan los muñequitos mutantes 🙂
el punto for demuestra el punto tu. Cuando no nieva no encienden la calefacción al máximo, seguro.
Esos dedos congelándose… x)
Muchacha, ¿no vas a pasar frío? ¡Esos dedos!
Es lo que tiene cuando te dedicas a amasar nievecita para hacer muñecos con pinta de pollo mutante zombi…
Faiv: si la calefacción no está a 240º F, las sábanas están tan frias que parecen mojadas.
Pasé una Semana Santa en León: la família dormía en la cocina, porque tenían una cocina econòmica, o bilbaína, de hierro colado y con brasas toda la noche. Nosotros, que éramos invitados y de la zona del Mediterráneo (que con 5ºC ya nos quedamos helados por mucha ropita que nos echemos encima), tuvimos el privilegio de ocupar el dormitorio principal.
Y durmiendo en cueros, ya que el tema de los pijamas no lo solemos usar…
No voy a contar nada más, pero os aseguro que han pasado 20 años y aún noto el frío en los deditos (congelados) de los pies.
Y el peso de las mantas zamoranas, que dan la sensación de que te ahogas bajo 17 Kg de lana, pero que no dan calor…
EL HORROR!!!
🙂