Es curioso, con la de cosas que pasan en el mundo a todas horas, y me siento un poco rara escribiendo esto, como si estuviera informando del hallazgo de una mariposa de cristal en un vertedero, pero vaya. Es culpa mía en parte porque no toco mucho ese mundillo. Y hace ilu rozarlo de cuando en cuando.
En fin, a lo que iba: mañana viernes, en Navajas, quien se pase por el Hotel Salto de la Novia (una preciosidad de villa reformada con todas las comodidades y con un fabuloso jardín detrás), podrá asistir, y no lamentará hacerlo, a una velada de lectura de poemas, conmemorando el II Centenario de Espronceda. Quien asocie a esto el adjetivo «aburrido», no sabe lo que es, de verdad, una buena lectura en voz alta. Lo sabrá mañana. Os recomiendo que vayáis a verlo, porque es otro mundo, y nunca viene mal ver otros mundos.
Y digo yo… ¿Estará ese hostal cerquita de eso del Salto de la Novia, cascada natural que tengo que ir a ver este verano sí o sí?
Imposible acercarme (y será una lástima perderme un recital donde La canción del Pirata tendrá especial protagonismo, supongo).
Un saludín
Cerquita no: cerquísima, a un paseíto. Y ciertamente te tienes que venir, hombreeee. Avisa, ¿eh? Si no puedes este finde, cuano puedas.